II XC Caimanes Coirós por Pirucho Pequeno
El Caimán es una especie de cocodrilo de la familia Alligatoridae. Es endémico de las regiones subtropicales y tropicales de Sudamérica y de una pequeña región del noroeste de España que abarca desde Betanzos hasta Oza. Su nombre deriva de la coloración de manchas difusas entre el verde intenso y el gris pálido, lo que lo ayuda a mimetizarse con el paisaje que caracteriza las carreras que organiza.
Cualquier que ha observado a los Caimanes de Betanzos sabe que acostumbran a pasar largas estancias apostados en las cervecerías, con la finalidad de refrescarse tras horas de actividad ciclista. Son carnívoros depredadores, consumen grandes cantidades de alimentos en la Parrillada Barral y demás establecimientos de la zona.
Se sabe que son organismos peligrosos para los demás ciclistas, atacan sigilosamente y crean elaboradas trampas con forma de circuito en la que son capaces de atrapar a más de un centenar de corredores de una tacada. Poseen la habilidad de diseminar gran cantidad de tierra, piedras y hojarasca con tal crear un trazado único y enriquecer con ello el calendario gallego de XC.
Bueno dejemos la charla a lo National Geographic y pongámonos en serio, decir que el II XC Caimanes Betanzos fue un carrerón sería quedarse corto. Es una de esas raras ocasiones en que se tienen ingredientes de primera y unos cocineros que les saben sacar todo el partido posible. Esta carrera lo tiene todo… un circuito vistoso, divertido tanto para el público como los participantes, una salida ancha y cómoda, bien ideada para intentar reducir el peligro al mínimo. Un aparcamiento espacioso con capacidad para albergar a furgonetas de equipos, vehículos particulares, carpas y al Combo Dominicano si me apuras . Un trazado cercano a los espectadores, centrado en una pequeña área, nada de largas caminatas monte través, totalmente accesible desde dos pistas forestales fácilmente transitables. Lo siento por Cambre, la carrera de casa, pero desde ahora esta es mi preferida.
No se si es un trazado de la old o de la new school, solo se que no hay nada que se le parezca en el Open Gallego y eso es lo bueno, en la variedad está el gusto. Duro y técnico, sus 3km 800m dan para que haya un poco de todo; subidas largas de cadencia, otras más cortas de habilidad, bajadas rápidas en las que solo debes soltar los frenos y dejarte ir, otras en las que más te vale saber bien cómo trazarlas si no quieres caer y las mejores de todas, las peraltadas. En las que si no sabes las tomas por donde te lleva la bici, pero si eres un betetero de tomo y lomo, domas la rueda delantera, la pones justo donde tu quieres y aprovechas la inercia para ir un poquito más rápido que el resto. El balcón de Beni es el ejemplo perfecto de este último tipo, una bajada con tres curvas ligeramente peraltadas concatenadas, donde los espectadores disfrutamos de un gran espectáculo. Nada de caídas, ni sangre, solo ver quien sabe andar en bici y quien solo sabe dar pedales.
A continuación os dejo con una pequeña selección de estampas de la jornada, no dudéis en pulsar AQUÍ para acceder al álbum.
Nos vemos dentro de 7 días en el XC de Mugardos, en esta edición disfrutaremos de las mismas condiciones climáticas?, ¿será un remake de ciclistas en la niebla?.
Se puede decir que es una especie de “groupie de ciclistas”, nunca ha competido pero le encanta el mundo del ciclismo. Sus tareas principales son avituallar y fotografiar a todo aquel que me se lo pida con una sonrisa. Sus albumes de fotos en GOOGLE+ son visitados por cientos, miles, millones de personas y hasta marcianos y derivados. Ojo que aunque la veáis en las carreras con una mirada angelical no recoge ni chaquetillas ni termicas en la salida, lo que le da fama de mala mujer.
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