Test by Amanciio (Mundobiker.com) – John Luck Avatar MTB 3.0
Gracias a www.Mundobiker.com y a mi amigo Amanciio (Rubén) hoy os traigo el Test que le …. bueno mas bien sus primeras impresiones… os dejo con el:
Hoy ha llegado el gran día, el de la prueba de las zapatillas Luck Avatar 3.0, conseguidas a través de la tienda de Valwindcycles.
Para los que no conozcáis la marca, Luck lleva ya varios años haciendo calzado específico para el ciclismo, solo que lo hacían bajo el nombre de John Luck. Se trata de una empresa riojana, sita en Arnedo. Han estado presentes en varios pies de ciclistas, como Graeme Obree, ex récordman de la hora antes de Induráin.
Anteriormente yo mismo tuve unas John Luck, creo recordar que por el año 96/97, que fueron mis primeras zapatillas de esta marca, por lo que en cuanto vi una foto de estas Avatar me decidí a comprármelas en cuanto me fuera posible, ya que estéticamente me encantan y tenía ganas de probar el famoso cierre BOA.
He de decir que lo primero que se nota con estas zapatillas es que son ligeras. He pesado mis antiguas Scott con un peso por cada zapatilla (sin calas) de 465 gramos, mientras que las Luck han pesado 390 gramos con las calas ya colocadas.
En segundo lugar, y una vez puestas donde tiene que ser, esto es, en los pies, lo primero que notas es una rigidez muy grande, lo que se va a traducir en eficacia a la hora de pedalear gracias a esa misma rigidez. Pero esa misma rigidez se convierte a su vez en uno de los puntos negativos de este tipo de zapatillas, porque a la hora de andar (cuando vas a subirte a la bici o te bajas de ella) requieren de un periodo de aprendizaje para poder caminar con ellas. Se podría decir que es algo similar a ponerse unos zapatos de tacón alto en el caso de las mujeres.
Una vez colocadas las calas en su sitio, metemos el pie en la zapatilla y procedemos a «atarlas» con el cierre BOA (llamado Atop en estas zapatillas) y vemos que es un sistema sencillo de usar, comodísimo de poner y de quitar y para nada engorroso. Atrás quedan los tediosos cordones de toda la vida que, si nos quedan largos, se nos pueden enganchar con los platos; atrás quedan ya el velcro y los sistemas de carraca. A mí personalmente me ha convencido mucho este sistema de apertura y cierre. Para apretar basta con ir girando la rueda en sentido horario, y puedes escuchar perfectamente cada uno de los clics mientras notas cómo te va apretando en el empeine. Y para liberar basta con girar en sentido antihorario, con un simple cuarto de vuelta ya tienes las zapatillas flojas para podértelas quitar cómodamente. Esto se convierte en un punto fuerte de estas zapatillas.
Sin embargo, después de hacer equilibrios para no caerme mientras sacaba la bici de casa, me he encontrado con el primer inconveniente de estas zapatillas, pero que a su vez también es un punto positivo, y me explico: he ido a enganchar los pies a los pedales (unos Crank Brothers Candy 2) y, sorprendido, he visto que no calaban. Primero he pensado que no habría colocado bien las calas, pero después he recordado que quizá los tacos laterales topaban con la plataforma de los CB y que por eso no enganchaban. Efectivamente, me he parado, he desatornillado uno de los tacos laterales (por eso se convierte en un punto positivo, ya que de no haber podido desatornillar los tacos las zapatillas no me habrían servido de nada) y he enganchado a la primera. Así que me ha tocado quitar ambos tacos laterales y así he podido comenzar la ruta. Sin embargo, esto me va a obligar a buscar una solución para poder poner nuevamente los tacos en su sitio.
Nota: (problema que presentan en algunas zapatillas los pedales Crank Brothers, para lo cual tienen a la venta unas placas para colocar debajo de las calas)
Una vez solventado el inconveniente, ya he empezado a pedalear con ellas. Gracias a que no llevaba tacos laterales he podido comprobar cómo los pedales Crank Brothers efectivamente tienen un juego lateral bastante grande, cosa que hasta ahora con mis zapatillas Scott nunca había podido comprobar (cuestión de los susodichos tacos). He notado una gradísima rigidez en el conjunto pie-pedal, lo que me ha permitido pedalear de una forma más cómoda y más segura, puesto que, inconscientemente, la rigidez te transmite seguridad. En este aspecto he de decir que las zapatillas son exclusivamente para pedalear, y que para andar hay opciones mucho mejores. Si eres un biker acostumbrado a «patear» en tus excursiones, estas zapatillas no son para ti. Sin embargo, si eres un «rallyeman» y amante de ir rápido, estas zapatillas son ideales (imagino que como todas las del estilo de estas Luck).
Resumiendo:
Puntos a favor:
– Estética. Habrá a quien no le guste este tipo de zapatillas de «estética futbolera», pero a mí me encantan.
– Rigidez. La suela de carbono hace que tu energía vaya directa a los pedales.
– Ligereza. Se agradece llevar algo ligero en los pies.
– Tacos desmontables. No sólo por el desgaste de los mismos, sino porque te permite usar las zapatillas con más tipos de pedales.
– Cierre BOA (Atop). Comodísimo ponerte y quitarte las zapatillas gracias a su cierre.
Puntos en contra:
– Tacos laterales muy altos. Por eso me ha tocado desmontarlos, ya que las calas si no quedan muy hundidas y no enganchan.
– Estrechez. Este tipo de zapatillas suelen ser más bien estrechas, y a los empeines anchos nos quedan más bien «apretadas».
– Rigidez. Este punto positivo para el pedaleo, se convierte en un desastre para caminar. Y si quitas los tacos laterales, prepárate para patinar cuando las calas toquen el suelo.
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- STAFF – MOVEMBER – LUIGGI